El nuevo Kia Sportage se prepara para su llegada al mercado
El nuevo Kia Sportage se prepara para su llegada al mercado
Tras su debut en el Salón Internacional de Frankfurt, el nuevo Kia Sportage se enfrenta a unas duras pruebas bajo calor intenso, como parte del programa de pruebas más extremo y riguroso que jamás ha llevado a cabo la marca.
Ya en su cuarta generación, el nuevo SUV compacto de Kia está en las fases finales de su desarrollo previo a su llegada al mercado en el primer trimestre de 2016. Los ingenieros están probando el Sportage en el Death Valley, uno de los lugares más calientes de la Tierra, con temperaturas de hasta 56ºC en los meses de verano.
Esta serie de pruebas indican que Kia puede desarrollar coches diseñados para funcionar en los entornos más duros. Las pruebas de calor extremo del nuevo Sportage se han centrado en el desarrollo del sistema de calefacción, ventilación y aire acondicionado (HVAC).
Entre los distintos métodos de prueba con alta temperatura ambiente, los ingenieros de Kia emplean normalmente tres rigurosos tests muy exigentes para el sistema de HVAC y sus efectos en la refrigeración del motor y la transmisión, cuando el ambiente es muy caluroso.
El primero de estos tests es una subida, el vehículo se deja expuesto al sol del mediodía durante una hora para que la temperatura del habitáculo alcance 50ºC, entonces el Sportage se conduce a 100 km/h desde el nivel del mar hasta unos 1.500 m de altura por la zona llamada Furnace Creek, una cuesta continua de 27 km en el Death Valley. Esta prueba se realiza para comprobar que la carga adicional en el motor tiene un efecto mínimo en la capacidad del coche para refrigerarse a si mismo y a los ocupantes.
El segundo test es la conducción con parada y arranque, que simula las condiciones típicas del tráfico congestionado en la ciudad. Los ingenieros conducen el nuevo Sportage por la zona de Furnace Creek a 40 km/h durante dos minutos, después paran el coche y lo mantienen al ralentí durante otros dos minutos; este proceso se repite varias veces. Esta prueba se ha ideado para aumentar la exigencia al motor, la transmisión y el sistema HVAC, de cara a eliminar eventuales deficiencias.
El último test concebido por los equipos de pruebas de Kia para el nuevo Sportage es de conducción lenta, que tiene lugar en el punto más bajo de Norteamérica, Badwater Basin, a unos 86 m por debajo del nivel del mar. Tras una hora al sol, se conduce el nuevo Sportage a 40 km/h durante 30 minutos cada vez, permitiendo a los ingenieros evaluar y mejorar la capacidad del sistema HVAC cuando se reduce drásticamente el flujo de aire hacia el condensador del aire acondicionado.
Además de las exigentes pruebas a las que se somete el coche en el Death Valley, Kia también lleva a cabo una serie de pruebas con calor extremo en las instalaciones norteamericanas de la compañía en el Centro de Pruebas de Mojave. Ubicado en el interior del desierto de Mojave, en California, este centro de pruebas demuestra hasta qué punto Kia quiere asegurar la calidad y durabilidad de cada nuevo modelo que crea, incluído el nuevo Sportage.
Establecido en 2004, el Centro de Pruebas de Mojave está a unos 177 km de Los Ángeles. En los 17,4 km2 que tiene el centro se realizan extensas pruebas dentro y fuera de carretera, sobre numerosos tipos de superficies. En esta parte del mundo, notablemente calurosa y seca, las instalaciones también permiten a los equipos de desarrollo llevar a los materiales y componentes del coche hasta las condiciones climáticas más exigentes.
El Centro de Pruebas contiene 120 km de carreteras pavimentadas, incluidos un óvalo de alta velocidad de 10,3 km, caminos de tierra, superficies de grandes vibraciones, instalaciones para pruebas de frenos y rampas de diferente inclinación. Cada uno de ellos permite a los ingenieros evaluar y afinar el confort de la suspensión, la estabilidad de los frenos y el nivel de NVH de los prototipos y modelos de producción.
El Centro de Mojave también aloja instalaciones para pruebas de fatiga de materiales, en donde coches enteros o distintas piezas se exponen durante un año a la continua radiación UV de los intensos rayos solares de California. Esta exposición se acelera mediante varios dispositivos de prueba, lo que asegura de forma definitiva que las piezas y componentes de los vehículos Kia no se deterioran bajo un calor extremo y permanecen intactos durante toda la vida del coche.
La cuarta generación del Kia Sportage está prácticamente al final del programa mundial de pruebas, en la que ha participado una flota de vehículos de prueba sujetos a numerosos tests de durabilidad y fiabilidad. El recorrido total acumulado ha sido de más de 5,5 millones de kilómetros, aproximadamente 137 vueltas a la Tierra alrededor del ecuador y mucha más distancia de la que recorren la mayoría de los automovilistas durante toda su vida.
Desarrollados para satisfacer las necesidades de clientes en todo el mundo, el Sportage ha soportado altitudes extremas, tormentas de arena, lluvias torrenciales, ciudades congestionadas, puertos de montaña y extensas pruebas de fatiga de materiales que abarcan desde -35ºC hasta 110ºC. Las extensas pruebas realizadas sobre las más variadas carreteras del mundo convertirán al Sportage en un automóvil verdaderamente global cuando llegue al mercado.
Todos los modelos de Kia se someten a pruebas para asegurar la durabilidad más alta posible en todas las condiciones. El nuevo Sportage ha sido objeto del programa de pruebas más extenso e intenso que ha realizado la compañía hasta la fecha.
Como todos los Kia vendidos en Europa, el nuevo Sportage tendrá la garantía exclusiva de Kia de 7 años o 150.000 km.