Uniroyal lanzó al mercado los primeros neumáticos direccionales de verano
Uniroyal lanzó al mercado los primeros neumáticos direccionales de verano
El desarrollo de la tecnología de los neumáticos depende en gran medida también de la tecnología del automóvil. Recordar el contexto histórico del automóvil ayuda a comprender mejor los avances en neumáticos, así como a apreciarlos en su realidad socioeconómica. Si miramos hacia atrás en el tiempo, podemos ver que los neumáticos Uniroyal han estado siempre a la vanguardia, fomentando carreteras más seguras, sea cual sea el clima.
Si rebobinamos hasta 1990, el mercado estaba evolucionando a neumáticos con una tendencia hacia una clasificación de velocidad más alta: V (hasta 240 km/h) y ZR (más de 240 km/h). Asimismo, el segmento de neumáticos súper anchos (16 y 17 pulgadas en ese momento) se disparó.
Dada esta tendencia, había motivos para creer que el mundo del automóvil estaba evolucionando al mismo ritmo. Los consumidores se preocupaban cada vez más por la imagen, por lo que los automóviles se convierten en un indicador de estatus social. Por tanto, no es de extrañar que la producción de neumáticos anchos condujera al desarrollo de llantas de aleación ligera y chasis de perfil bajo. Todo el mundo estaba dispuesto a personalizar y a diferenciar su vehículo.
Es por eso por lo que en 1992 Uniroyal lanzó su rallye RTT-1, el primer neumático direccional de verano del mundo, diseñado para las exigencias del mercado en términos de diferenciación y aspecto exclusivo. Uniroyal seleccionó cuidadosamente el nombre de su primer neumático direccional de lluvia «Rain Tyre Tuning», más conocido por sus siglas RTT-1, debido a un atractivo perfil direccional en forma de flecha. En definitiva, Uniroyal lanzó el RTT-1 para reflejar la lujosa imagen de los vehículos de gama alta que eran tan populares en ese momento.
En lo que respecta a su rodadura, el RTT-1, con su perfil direccional, tenía una flecha a un lado para indicar la dirección de montaje. Este neumático debía montarse de tal manera que la flecha apuntara hacia la parte delantera del vehículo. Su permutación sólo era posible de adelante hacia atrás, y viceversa. Una permutación derecha/izquierda o una permutación izquierda/derecha los habría hecho peligrosos de usar.
Con los neumáticos RTT-1, Uniroyal no sólo optimizó el rendimiento sobre suelo húmedo, sino que también satisfizo las demandas del mercado en la categoría ZR (más de 240 km/h) y con dimensiones más amplias. La inclusión de los efectos acuodinámicos y la integración de ranuras anchas y continuas en la banda de rodadura hacen que el neumático RTT-1 sea especialmente resistente al riesgo de aquaplaning, un criterio esencial para los neumáticos anchos.
Asimismo, los RTT-1 eran neumáticos de lluvia para coches deportivos. La gama incluía 30 tamaños, con estandarizaciones para velocidades superiores a 240 km/h (150 m/h) y disponibles en tamaños de 14 a 19 pulgadas.
Símbolo de una nueva era, no sólo por su aspecto vanguardista, sino también por su audacia, el RTT-1 fue pionero y se caracterizó durante años por su simetría. Gracias a Uniroyal, se produjo un cambio de rumbo en la industria hacia perfiles direccionales que contribuyeron a la evolución de los neumáticos y poniendo, además, el foco en Uniroyal como precursor en esta nueva etapa.
La naturaleza direccional del contorno se terminaría extendiendo a toda la cartera de Uniroyal. Así las cosas, esta nueva tecnología se convertiría en parte integrante de la identidad de la marca del paraguas rojo durante las próximas dos décadas.